Jesús Campos Cortés, socio director de Corporate Resources Management y miembro del Consejo Consultivo de The Logistics World Summit & Expo, alertó que las autoridades federales como estatales tienen que prestar una especial atención a la inseguridad que se vive en las carreteras, pues la delincuencia y robo de unidades de carga provoca tanto daños físicos a los choferes y un alza del 20 por ciento en los seguros de las cargas y cancelación como perdida de entregas.
“Dicha
realidad provoca que muchos choferes no quieran manejar camiones de entregas,
alza de autopartes, y atrasa los plazos de entregas en el delivery. Una empresa
puede aumentar hasta en 50 mil pesos en monitoreo de sus unidades y blindar un
camión cuesta hasta un millón de pesos”.
Detalló
que la velocidad y exactitud en la industria de la logística son la palabra
clave para las industrias del sector delivery, abundó que, las empresas de
logística tienen grandes requerimientos de ubicación y manejo de cajas, sobres,
paquetes, etc., que les conlleva a ubicarse en sitios clave, aspecto que
privilegia a Querétaro y el bajío, así como Puebla, que tienen a su alrededor a
casi un 70 por ciento de la población del país.
Recordó
que el mundo de la logística tiene grandes cambios, que se presentó por la pandemia
y se tienen nuevos esquemas de laborar en los negocios del delivery, pues se
requiere de velocidad, almacenamiento, logística y tecnificación de parte de
los trabajos de las empresas.
Indicó
que México no debe confiarse y pensar que China dejará salir a todas las
empresas que se ubican en dicha nación, debido al nearshoring, por ello; se
tiene que prestar especial atención a que el delivery industrial no se afecte
en demasía o pierda su eficiencia. No tenemos que confiarnos y pensar que ya se
tiene ganada la batalla comercial, el nearshoring exige nuevas leyes,
infraestructura, inversiones, etc.
Se
tiene que establecer un plan de 5 años de logística inteligente y con nuevas
vías de comunicación fuertes y que se haga la infraestructura que necesita
México.
Ejemplificó
que es tal el mercado que se tiene que atender que se estima que las tres
empresas de transporte de carga de Estados Unidos mueven lo mismo en
contenedores que aquello que hace México en todos su rubros industriales.
“Es
funcional el modelo hombre camión, pero se requiere de tener una modernizar de
dichos automotores así como de su logística. En México, se estima que un 40 por
ciento de las empresas de logística son de 1 a 6 camiones de carga”, dijo.
Ejemplificó
que México moviliza en sus puertos, aduanas, trenes y camiones, un estimado de
8 millones de contenedores; mientras que puerto más grande de China mueve hasta
47 millones de contenedores, es decir; tenemos que estar listos para una
andanada muy fuerte de mercados asiáticos y se tiene que prestar especial
atención para que la logística sea motor del país.
URGE
DESCARBONIZAR AL SECTOR DE LA LOGÍSTICA
Por
otra parte, Ximena
Cantú, ESG Officer de la empresa Energía Real, detalló que “involucrar a la
cadena de suministro en la reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero
(GEI) representa una de las estrategias más efectivas para lograr la descarbonización
de las empresas”.
De
acuerdo con diversos estudios, el nivel de las emisiones de la cadena de
suministro puede ser hasta cuatro veces más alto en promedio que el nivel de
emisiones de las operaciones.
Esta
proporción disminuye especialmente en sectores como energía y minería, que
suelen ubicarse al inicio de la cadena de suministro. Por otro lado, esta
proporción aumenta para las empresas situadas más abajo en la cadena de valor,
como las minoristas.
Las empresas y a sus
proveedores pueden acelerar el propósito de volverse Net-zero y
así mitigar su impacto
sobre el ambiente es posible, y requiere de la combinación de las
siguientes acciones: una
medición
y reporteo transparente; una gestión de la cadena de suministro, que implica seleccionar proveedores que cumplan
con criterios de sostenibilidad alineados con los objetivos ESG de la empresa.
El uso de
materias primas sostenibles y productos con un menor impacto ambiental a lo largo
de su ciclo de vida. Esto puede incluir la preferencia por materiales renovables,
reciclados o certificados como sostenibles.
Priorizar
el uso de fuentes de energía renovable en las operaciones de la empresa puede ayudar
a reducir las emisiones, al disminuir la dependencia de combustibles fósiles y
mitigar las emisiones asociadas con la generación de electricidad.
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