Grupo Gayosso, empresa del ramo funerario en México, lanzó su gama
de productos de corte ambiental, integrada por productos y servicios funerarios
que ayudan a disminuir el impacto eco-ambiental de las prácticas funerarias.
De esta manera, al fallecer una persona, se podrá
elegir despedirse de manera más amigable con el entorno.
Un primer caso es el proceso de la inhumación, en el cual, esta empresa cuenta con un ataúd de mimbre el cual tiene un bajo
impacto ambiental, ya que este se desintegra en un periodo de un año o año y
medio (dependiendo de la humedad del subsuelo), en comparación con un ataúd de madera que tarda 15 años en
desintegrarse u el ataúd metálico toma cerca de 100 años su proceso de
descomposición.
En el caso de las cremaciones, se han desarrollado úrnas ecológicas y biodegradables
que utilizan una parte de las cenizas y funcionan como un complemento para que
amigos y familiares de los deudos puedan realizar una ceremonia especial,
honrando a sus seres queridos y conservando parte de estas en un nicho, ya que
en el 70% de los casos las familias que se deshacen de las cenizas de su ser
querido, posteriormente se arrepienten al no contar con un espacio o lugar a
dónde visitarlo.
Estas urnas ecológicas y
biodegradables son fabricadas con sal, arena, tierra o composta que logran una desintegración en
armonía con el medio ambiente y que entre sus diversos beneficios que conllevan
es que al ser una Urna de sal
que es urna esférica elaborada a base de sal marina y aglutinantes vegetales.
El principal beneficio de esta urna radica en el calcio de las cenizas, que al
entrar en contacto con el agua de mar ayuda a regenerar arrecifes de coral, en
caso de arrojar las cenizas al mar o los ríos. El tiempo de disolución de este
producto es de 15 a 20 minutos.
La urna de arena, es esférica elaborada
a base de arena y aglutinantes vegetales, diseñada para despedidas en el mar o
en lagos, lagunas o estuarios. Uno de sus principales beneficios es el
nitrógeno y el fósforo que contienen las cenizas que nutren al fitoplancton y
aumenta el nivel de clorofila en el agua, y que se desintegra en 20 minutos.
La urna de tierra está hecha a base de sustrato vegetal,
mineral, composta de fibra de coco y cáscara de cacao, diseñada para despedidas
en cualquier ecosistema terrestre como: bosques, selvas y jardines e ideal para
sembrar junto a un árbol con el beneficio que las cenizas contienen nitrógeno,
fósforo y potasio, los principales nutrientes para las plantas. Este producto
se desintegra en 1 semana a 5 meses.
Finalmente esta la llamada urna-árbol o
biodegradable, que es en forma de maceta que contiene las cenizas del familiar,
tierra y una semilla en su interior, y al ser enterrada da paso a una nueva
vida. Este árbol, con el paso del tiempo, implica dos grandes beneficios al ser
humano: ayuda a reforestar zonas verdes y además queda como recuerdo del ser
querido que perdemos, un proceso tanatológico importante que facilita el
desprendimiento emocional en los familiares o amigos. Este producto tiene un tiempo
de desintegración: de un año a un año y medio.
También
dicha empresa lanzó un nuevo método funerario llamado
Aquamación. Esta nueva tecnología está basada en una combinación de agua y
temperatura, que a través de un método físico-químico de hidrólisis permite
acelerar el proceso natural de la desintegración de las células. Esta técnica brinda
beneficios tangibles para el medio ambiente al utilizar 90% menos de energía
que la cremación tradicional y al emitir 160 veces menos de partículas finas.
Esta vanguardista tecnología se usa en países como Estados Unidos, Canadá y
España y ahora México.
Al respecto, Oscar Chávez, Director de Planeación y Nuevos Negocios de
Grupo Gayosso, declaró que “hoy más que nunca el sector funerario debe tener
puesta la mirada en el cuidado del medio ambiente, así los mexicanos puedan
escoger una alternativa ecológica para la práctica funeraria”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario