En
la presentación de los resultados de la Alianza para la Reducción de Riesgos y
Recuperación ante Desastres Naturales "Sumados para prevenir: dos años de
trabajo", se destacó que México está
entre los 15 países con más afectaciones por fenómenos naturales en los pasados
10 años en el mundo.
Indicando
que es muy importante el invertir en la prevención, ya que por cada peso
invertido en prevención se ahorran 7 en recuperación de los daños causados por
desastres naturales.
Sobre
este programa se informó que se ha tenido impacto en más de 100 mil personas en
270 comunidades en 50 municipios en los estados de Puebla, Oaxaca, Guerrero,
Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo, Yucatán, San Luis Potosí y Veracruz.
Lo
cual ha requerido una inversión de más de 17 millones de pesos. Entre otros
datos ha sido la conformación de 270 comités de riesgo, 193 diagnósticos de
riesgo y creación de 167 planes comunitarios con la realización de 5 foros de
intercambio de ideas para la atención en las comunidades. Todo ello ha
permitido la edición de una guía de buenas prácticas para atender los riesgos.
Cabe
mencionar que esta Alianza para la reducción de riesgos y recuperación ante
desastres en México, es una organización compuesta por diversas instancias como
es Fomento Social Banamex, World Vision México, Ayuda en Acción, Oxfam México y
el Programa de Apoyo a la Reducción de Riesgos de Desastres en México (PNUD),
tras dos años de trabajo dio a conocer que ha logrado crear e impulsar acciones
concretas para enfrentar los desastres provocados por los fenómenos
naturales.
Entre
las acciones que se llevaron a cabo para enfrentar situaciones de desastre
destacan: programas de capacitación, organización comunitaria, generación y
sistematización de buenas prácticas preventivas, así como el intercambio de
experiencias entre integrantes de organizaciones civiles, comités comunitarios
y representantes de gobierno.
Al
respecto, Vanessa González, directora operativa de Fomento Social Banamex, dijo
que “durante estos dos años se logró capacitar a comunidades a través de la
impartición de talleres, diseño de protocolos, planes de prevención y la
creación de brigadas y organizaciones comunitarias para enfrentar situaciones de
desastre”.
Indicó
que laboran en el ejercicio de sensibilización de este tema que está pensado para los pobladores de las
comunidades más vulnerables frente a las fuerzas de la naturaleza, sin embargo,
como lo señala, además de realizar un mapeo informativo sobre las zonas más
riesgosas, también se cuenta con conocimientos necesarios focalizados en la
prevención en temas de cultivo y construcción de escuelas y vivienda “para que
la comunidad pueda hacer sus planes en colaboración las autoridades municipales”
precisó. Dijo que
se han invertido más de 8 millones de pesos por parte de este banco y las demás
organizaciones han duplicado esta aportación en especie, trabajo y hasta
monetarios, ello en atención de los municipios mencionados.
Esto
a base de un trabajo de dos años de preparar comités comunitarios para
implementar acciones coordinadas en las diversas regiones para este objetivo y
tener trabajos de protección civil.
Dijo
que los lugareños son quienes hablan directo con las autoridades para el saber
zonas de riesgo y se hace más que nada mapeo de riesgo, aunado a que se
tienen diversos niveles de colaboración
con las autoridades que en algunos casos han incorporado los proyectos sociales
a sus planes oficiales.
Sobre
los obstáculos que se han enfrentado es que el gobierno tiene sus políticas
fijas y sabe cómo gastar recursos, atención, etc. Y presentarles ideas locales
de prevención choca con su rigidez y se trata de abrir está situación para que
se tenga más interacción oficial y se puedan bajar recursos públicos como
acciones.
“En la madrugada empezamos a oír el ruido del
río, nos levantamos y ya teníamos al agua adentro, se había ido el puente y
nadie podía pasar a dejar cosas. En los otros años ya hemos estado preparados
ya sabemos cuándo viene la creciente del río”. Es el testimonio de una
beneficiada de las acciones de sensibilización de esta alianza que ahora tiene
mayor capacidad de reacción frente a los desastres naturales.
Por
su parte, Silvia Novoa, directora de World Vision México, dijo que la infancia
es uno de los principales actores sociales afectados por los desastres
naturales, e indicó que se trata de desarrollar en los menores el saber actuar
en estar prevenido ante los desastres que le afecten.
Mientras
que Ricardo Fuentes, director ejecutivo de Oxfam Mexico, detalló que la
desigualdad social ésta muy desempoderada para tomar decisiones de su destino y
poder responder ante estas crisis y son los más expuestos para reacción ante
los fenómenos naturales tanto en el momento como posterior al mismo. Se trata
de atender a los más pobres y que esta Alianza en la cual han participado en
entidades como es Guerrero y Veracruz con la impartición de talleres de
reducción de riegos.
Finalmente,
Marco Antonio Castillo, director de ayuda en Acción México, indico que los resultados
de las fases uno y dos se tienen 10 Ongs locales trabajando en piso, y son 3100
personas participan en la promoción de este esfuerzo y son los principales
capacitados en esta labor.
Dijo
que la inversión ha sido focalizada en las comunidades y esto si bien al final
se puede ver como pocos recursos, no lo han sido ya que se tiene una labor
directa con las comunidades y estimo que se han obtenido los resultados
deseados.
En
fase tres a implementar en los siguientes dos años, abundó, se tienen las
siguientes metas como es consolidar capacidades ya desarrolladas, con
seguimiento de fortalecer a los promotores y actualizar los planes, creación de
redes microrregionales compartidos en
caso
de cuencas, ejercicio focalizado con sujetos sociales como son los niños y
mujeres así transversalizar los riesgos con visión de género en este tema.
En
los comités se tendrán cinco temas de ser atendidos como es agua, vivienda,
café, maíz y miel, campos de intervención que serán una prioridad permitiendo
la protección de cultivos por cambio climático. Además de incidir en políticas
públicas para que las redes y la Alianza tenga una mayor conexión con las
autoridades municipales, estatales y federales. Así como profundizar en la
campaña de sensibilización en las comunidades sobre los riesgos. Así como pasar
de 100 mil personas beneficiadas a 2.1 millones, y de 3 mil personas capacitadas
a 105 mil participantes directos en los comités. Aunado a ejercer un
presupuesto de 31 millones de pesos.
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