Para Insultar con
Propiedad, es el título de un libro que ayudar a aprender
a insultar, que es una acción que bien coordinada es todo un arte, ya lo decía
el gran Schopenhauer. Se trata del último recurso cuando todas las demás artes
de la argumentación han fracasado, cuando no nos queda nada más que hacer o
decir, ya sea porque reprobamos tajantemente una conducta, porque nos hemos
visto perjudicados por una estupidez o porque —justo y de ninguna manera— no se
entienden razones.
Se cree que no es necesario recurrir
siempre a las «palabrotas» altisonantes, a expresiones zafias o al tan
manoseado «¡chinga tu madre!» en cada ocasión que se presenta, para poder
resarcirse o vengar una afrenta —aunque hay algunas que bien lo ameritan—, sino
que se puede recurrir al sarcasmo, a la ironía, a la elegancia y a la analogía
para poder darle un giro cuántico al insulto.
Por esta razón e importancia de los
insultos y palabras ofensivas, es que
Editorial Algarabia se dio a la tarea de
recopilar más de 2,000 insultos, muchos de ellos tomados de diccionarios,
legajos, textos literarios, pasquines y del uso coloquial del habla para formar
un diccionario que le haga honor al Arte de Insultar y ayude a que el público
lo haga “con propiedad”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario