La jefa de Naciones Unidas para Cambio Climático, Christiana Figueres, reconoció hoy aquí que la geopolítica y la crisis económica no ayudan a elevar el nivel de ambición que la lucha global contra el fenómeno debe alcanzar este año en Durban.
Al impartir la conferencia “Implementando los acuerdos de Cancún. El papel de América Latina para combatir el cambio climático” como parte de una visita de trabajo a España, Figueres expuso que a pesar de ello es posible este año mejorar lo alcanzado en 2010 en México.
Ante representantes de embajadas de países latinoamericanos, instituciones multilaterales y organizaciones no gubernamentales, Figueres fue interrogada respecto a las negociaciones de cara a la siguiente conferencia (COP 17) en Durban, Sudáfrica.
En la sede de la Secretaría General Iberoamericana, la funcionaria de Naciones Unidas señaló que “si el mundo fuera perfecto se tendría un acuerdo vinculante para todos los países que reconociera las diferencias e iría más allá de lo que dice la ciencia, pero es un cuento de hadas”.
“La realidad es que el nivel de ambición en este momento de dos bloques (países desarrollados y países en vías de desarrollo) no va a cambiar de aquí a Durban. El nivel de ambición hay que trabajarlo varios años”, sostuvo.
Destacó que los gobiernos pueden “mejorar la característica vinculante de Cancún y ese es el trabajo de este año y podría haber posibilidades de subir la ambición legal y predecibilidad de los acuerdos de Cancún”.
Dijo que lo deseable es que a la Conferencia de Durban los gobiernos lleguen con un nivel superior, y “sean ellos los que decidan qué pasos se dan”.
“Pero no creo. Si vemos donde está la política de Estados Unidos, que estamos saliendo de la crisis financiera tanto en Europa y resto del mundo, no creo que la geopolítica lo permita, pero eso no significa que Durban vaya a ser un Copenhague II”, comentó.
“Lo crítico de Durban es que los gobiernos den un paso más hacia adelante y no quedarse en los laureles de lo conseguido en Cancún, y esa decisión de saber qué paso dar es de los gobiernos”, manifestó.
La secretaria ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) comparó el proceso de lucha global contra el fenómeno con la construcción de la catedral de la Sagrada Familia de Barcelona, noreste de España.
“Estamos construyendo una catedral; para esto no hay una solución mágica. No es llegar con documento y ya. Este problema es de hace 100 años y estamos construyendo una catedral ladrillo por ladrillo, el de Copenhague fue importante, los de Cancún primordiales y hay que ver los de Durban”, recalcó.
Figueres recalcó que este año se irá sabiendo la posición de cada gobierno en consultas que se realizarán en los próximos meses, en reuniones técnicas y en sus informes.
En este acto, Figueres estuvo acompañada por el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, y la secretaria de Estado español sobre Cambio Climático, Teresa Ribero.
En su visita a Madrid, sostuvo también encuentros en el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN), y con diputados de diferentes formaciones políticas.
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